ACHEGA ARREGUI, José
Agustín. Nacido en
Icíar (Guipúzcoa) en 1954. Tornero de profesión. Ingresó en ETA a mediados de
los años 70 y fue detenido por primera vez el 10 de abril de 1976, acusado de
estar integrado en el comando de ETApm responsable del secuestro de José Luis
Arrasate, el 13 de enero de 1976, y del secuestro y posterior asesinato, el 8
de abril del mismo año, del industrial Ángel Berazadi, militante del PNV.
Estaba considerado como el jefe de los comandos operativos de ETApm. Fue uno de
los 29 presos políticos (ETA, FRAP y CCOO) que en agosto de 1976 realizaron una
huelga de hambre en la cárcel de Carabanchel (Madrid) para conseguir “la
amnistía total y sin exclusiones”. También figura entre los 23 presos que el 23
de mayo de 1977 solicitaron en la Presidencia del Gobierno el indulto total o,
alternativamente, el extrañamiento a un país extranjero, concretamente a Bélgica. El 2 de junio de
1977 fue indultado, siendo extraditado a Dinamarca. Detenido en Francia en
1981, un juzgado de París decretó su extradición a España, pero el Gobierno
galo prefirió confinarlo en la localidad de Antonne, de donde se fugó en mayo
de 1982. El 21 de marzo de 1983 fue detenido en Bilbao.[1]
[1] También aparece como
José Agustín Achaga Agirre. ABC: Importante operación policial contra ETA p-m.
ABC, 25 de marzo de 1983, p. 21 [online]; BOE:
Ministerio de Justicia. BOE 182, 1 de agosto de 1977 [online]; EL PAÍS: Veintinueve presos políticos de Carabanchel piden amnistía sin
exclusiones. EL PAÍS, 4 de agosto de 1976 [online]. EL PAÍS: Veintitrés presos
han pedido el indulto o, como alternativa, el extrañamiento. 24 de mayo de
1977 [online]; PUICERCÚS VÁZQUEZ, Luis:
Propaganda Ilegal. Itinerarios de prisiones 1972-1975. Madrid, El Garaje
Ediciones, S.L., 2018, pág. 404; SOLIDARIDAD:
Estos son los antifascistas. Boletín de Socorro Rojo, junio 1977 [online]; SOLIDARITAT: Amnistia total. Per Nadal
tots a casa. Boletín nº 36, octubre-noviembre 1976, pág. 11 [online]; UNZUETA, Patxo: De tornero a jefe de los “comandos operativos”. EL PAÍS, 25 de marzo
de 1983 [online]
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